Nosotros
Liceo Industrial Benjamín Franklin fue creada como un anexo del liceo A 78, sin embargo, al pasar el tiempo se inician las gestiones para lograr que funcione de manera autónoma con el nombre Liceo Luis Cruz Martínez, propuesta que es rechazada por el ministerio de educación, debido a que ya existían muchos liceos con ese nombre.
Un grupo de Docentes se concentra en la tarea de buscar un nuevo nombre. Era primordial para ellos que estuviera relacionado con un personaje reconocido por su contribución a la ciencia y la tecnología, entonces, seleccionan a Don Benjamín Franklin Folgers, un prolífico científico e inventor, nacido en Boston Estados Unidos el año 1706, que además de inventar el pararrayos, escribió interesantes ensayos sobre filosofía, política y electricidad. El también fabrico el llamado horno de Franklin o chimenea de Pensilvania (1744), artilugio metálico y más seguro que las tradicionales chimeneas; las lentes bifocales.
Continuando histórica de nuestro liceo, cabe destacar que durante el año 1983 se entregan las actas de notas de primer año medio firmadas por el primer director del establecimiento Señor Jorge Velasco y, debido a problemas administrativos, las clases deben realizarse en aulas de la actual escuela Inglaterra, ubicada en Ernesto Samitt con San Pablo. Un dato impresionante, es que desde su creación concita gran interés entre la comunidad, lo que produce una demanda explosiva de matrícula.
Por la alta demanda de estudiantes de las comunas aledañas, esto es: Cerro Navia, Pudahuel, Lo Prado, Renca; en el año 1983 e 1988 se establece una nueva sede de funcionamiento, ubicada en la calle La Plata con Mapocho, sector donde funcionara la escuela Grenoble. En este lugar, con sótanos y dependencias muy antiguas, se tejieron leyendas sobre fantasmas, apariciones y espíritus que era motivo de continuas conversaciones entre estudiantes, profesores y asistentes de la educación.
Entre los años 1989 y 1990, en la nueva sede de La Plata, el director de entonces: Don Daniel Flores, construye en conjunto con estudiantes y apoderados, una piscina que constituye durante muchos años un ícono y centro para la convivencia social y el desarrollo de clases de Educación Física; además, se realizan eventos de fin de año, convivencias, fiestas de navidad, entre otras actividades.
Durante el período comprendido entre los años 1983 y 2002 se crearon talleres y se fortalecieron las especialidades mediante diversos proyectos. En el año 1990 se desarrolló un proyecto de la fundación Andes que permitió obtener equipamiento para la especialidad de electrónica, generando así espacios didácticos en el enfoque por competencias, logro que permitiera ubicarnos como establecimiento, a la vanguardia de equipamiento en comparación con otros liceos que impartían la misma especialidad. Un segundo proyecto, de la Organización (GTZ) Sociedad Alemana de Cooperación Técnica, permitió obtener recursos para implementar Mecánica Automotriz en el sector metalmecánico, junto con recibir el apoyo de un experto que fue enviado desde Alemania para asesorar técnica y pedagógicamente a los equipos de trabajo. También, como producto de un activo trabajo técnico pedagógico, se adjudican los siguientes proyectos “Aprendiendo Física y Química en Circuitos científicos Multimedia les”, “Desarrollando competencias en comprensión lectora”, “Desarrollando competencias con simulaciones empresariales de investigación en
Robótica”. En el año 1994, asume la dirección del establecimiento Don Marco San Martín Illesca, y es durante su período de liderazgo que la Corporación de Educación presenta un proyecto al FNDR (Fondo Nacional de Desarrollo Regional) en el año 2002) por $1600 millones de pesos, que es aprobado para construir la nueva sede en que funcionamos actualmente, todo gracias a la expansión de matrícula que hemos sostenido a través del tiempo, debido a que hermanos, hijos, primos y amigos de nuestros alumnos y ex alumnos nos prefieren, porque grandes historias de estabilidad y éxito se han iniciado entre nuestras aulas y patios.
Con esta nueva edificación, no sólo desaparece la emblemática piscina del liceo. Paulatinamente, las antiguas dependencias colmadas de viejas historias de aparecidos y fantasmas tejidos durante los Campamentos de Verano, paulatinamente comienzan a olvidarse, pues se torna imperativo dar paso a la modernidad, crecer y ampliarse para satisfacer las demandas de la Jornada Escolar Completa y también dar cumplimiento a un sueño, un edificio cuya infraestructura pudiera albergar en el nuevo milenio a jóvenes que han llegado, y llegaran buscando ampliar sus horizontes.
En ese proceso nos encontramos en la actualidad. Desde el año 2014 con la nueva Directora del establecimiento la señora Angélica Olivares Quintanilla. Asegurándonos de continuar ubicados entre los establecimientos con la mejor tasa de titulación a nivel nacional (entre un 79 y 84%). Contando con más de 70 empresas como centro de práctica profesional, entre las cuales contratan como trabajadores a nuestros egresados. ¿Cómo? En primer lugar, con el compromiso de todos y todas como integrantes de esta comunidad educativa
VISIÓN
Generar, con todas y todos los integrantes de la comunidad y en
especial los y las jóvenes estudiantes de primero a cuarto año
medio de las especialidades de mecánica automotriz, electrónica,
electricidad y telecomunicaciones, auténticas oportunidades para
el logro de aprendizajes de calidad, en el ámbito personal,
valórico, cognitivo, procedimental y técnico, que permitan,
durante su trayectoria educativa, el diseño de un proyecto de vida
centrado en el autoconocimiento, la responsabilidad ante sí, los
demás el entorno y la tarea.

MISIÓN
Ser reconocida como una entidad educativa técnico profesional
del área industrial, que crece y se retroalimenta
permanentemente con el entorno, propiciando interacciones y
acciones educativas inclusivas y de calidad, que asegura el
desarrollo de competencias contextualizadas con las demandas
y requerimientos sociales, empresariales, educacionales y
medioambientales que la posicionan como una institución
destacada y valorada por la comunidad.